domingo, 30 de diciembre de 2012

Píllaro, tierra del heroico Rumiñahui



A partir de Ambato tomamos la ruta norte que lleva a uno de los cantones más viejos y emblemáticos de la provincia de Tungurahua, Santiago de Píllaro (Santiago por el Apóstol, y Píllaro, del cayapa Pilla = Relámpago y Ru = Hueco). Está ubicado a 2800 m.s.n.m. con un clima fresco y singular. Los buses circulan cada 20 minutos y el pasaje tiene un costo de $ 0.48. Es Día de Navidad y en 40 minutos por una carretera espectacular llena de curvas en diferentes niveles de altura, llegamos y un gran monumento al héroe Rumiñahui nacido en esta tierra, nos recibe. El personaje nació en un sitio llamado Huaynacuri, aproximadamente en 1492, fue hijo de Huayna Cápac y Nary Ati, por línea materna sus abuelos fueron Pillahuaso Ati el padre, Cacique de Píllaro y la Reina Choasanguil. Su nombre significa "cara de piedra". El Congreso Nacional en 1985, resolvió que el 1 de diciembre, se lo recuerde como héroe indígena, defensor del Reino de Quito de los conquistadores españoles.
¿Cómo habrá sido el lugar?
Con seguridad este enorme territorio hace 500 años estuvo cubierto de vegetación primaria, de la que quedan solamente algunos puntos en las estribaciones de las montañas más altas como los Llanganates, que ahora los encontramos semicubiertos de nubes. Dicen que Huaynacuri --hasta donde hemos llegado-- y las montañas cercanas fueron refugio de Rumiñahui y otros líderes indígenas durante la lucha de resistencia contra la invasión de las tropas de Huáscar primero, y luego contra los españoles al lado de Atahualpa su medio hermano, ambos hijos del tomebambino Huayna Cápac. Hay muchas historias en torno a expediciones en busca del tesoro, que partiendo de Píllaro fueron a los Llanganates y muchas de ellas se perdieron o sucumbieron por lo agreste de la montaña o la inclemencia del páramo. Dicen que en el sitio la tierra tiembla y se los traga. Sin embargo, una guía turística expresa que “la laguna de Pisayambo se encuentra ubicada en las inmediaciones del Parque Nacional Llanganates a 45 km al nororiente del cantón; por la ví­a que conduce a la parroquia San José de Poaló, el acceso es fácil y se la puede apreciar desde la carretera misma. Pisayambo es un lugar destinado al turismo naturista directo, pero su cause ha sido alterado, prácticamente la laguna es un embalse natural modificado. Se puede realizar caminatas, observación de la flora y fauna tí­pica de Páramos, camping, etc.”
Encuentro al pueblo de fiesta
El pueblo está de fiesta, se preparan los pases y los danzantes, como un preludio de lo que viene después, la famosa “diablada”, que moviliza a toda la población y a los turistas a nivel nacional e internacional. Píllaro es un cantón extenso. Una parte se llama “Píllaro Viejo”, con su parque antiguo y su monumento al General José María Urbina. Una placa dice: “Ilustre pillareño, Presidente Constitucional de la República, 1852-1856”, y una leyenda adicional: “Nadie nace esclavo en la República, ni puede ser introducido en ella en tal condición sin quedar libre”. Urbina promulgó la liberación de los esclavos negros, que más tarde los transformó en sus soldados, a los cuales se les llamaba “tauras”, porque la mayoría procedía del sitio de Taura en la costa. El parque tiene pinos, palmeras y cipreses envejecidos y algo olvidados. Lo rodeo, me gusta mirar a la gente, soy un extraño más, de los que a cada rato llegan por ese rincón serrano para maravillarse de cosas diferentes y hombres y mujeres diferentes. Un desayuno completo en un pequeño restaurant cuesta dos dólares y medio: un buen plato de arroz con pollo al jugo, un huevo duro, pan, queso, jugo de no sé qué y café con leche. A dónde más. Frente a la iglesia aparece un grupo bullanguero de jóvenes vestidos con llamativo atuendo azul, portando saxos, trompetas, trombones y otros instrumentos nuevecitos, se llaman “Banda-orquesta zon pillareñita”, y tocan muy bien los guambras; les tomo una foto y dicen: “vale para el facebook”, entonces les doy una tarjetita y esperan aparecer en nuestro espacio.
La Plaza de la Resistencia en Huaynacuri
Más allá entablo amistad con Juan Francisco Moreira. Me cuenta que es de Chone y que se ha casado con una chica del lugar y ahora trabaja con una camioneta de alquiler y le va muy bien. Hablamos sobre las bellas choneras y nuestro paso hace años con los alumnos del Benigno Malo y los buenos recuerdos. Juan Francisco me lleva a algunos lugares, primero a la Plaza de la Resistencia en Huaynacuri, lugar en el cual aseguran que nació Rumiñahui y vivió su niñez y juventud, poco antes de dirigir los aguerridos ejércitos de Atahualpa contra los de su hermano Huáscar y de organizar la defensa contra la invasión española, hasta su trágico fin. Allí existe una plaza que remeda una construcción indígena a manera de fortaleza desde la cual se divisa Ambato y Pelileo hacia el lado sur-oriental, y los Llanganates hacia el noroccidente, que según la leyenda fue donde Rumiñahui escondió los tesoros que estaban destinados al rescate de Atahualpa en Cajamarca, pero que ordenó  su regreso para depositarlos en algún lugar que hasta hoy es un misterio; según los entendidos, sería fabuloso, el mayor porcentaje de todo lo que se llevaron los españoles y de lo que se gastó en los templos de Quito. Cantuña lo supo de su padre Huanga, y de allí la leyenda de la construcción del templo de San Francisco de Quito mediante un “pacto con el diablo”. El cerro continúa cubierto de nubes y nos han dicho que es casi inaccesible. Rumiñahui y los suyos se llevaron el secreto a la tumba; todo cuánto hicieron los soldados de Benalcázar, tras incendiar y destruir la ciudad de Quito para descubrir el destino de los tesoros, resultó inútil.
Un personaje extraño e interesante
Cuentan los cronistas que en la época de la colonia un español de apellido Valverde estuvo casado con la hija de un cacique, quien fue uno de los líderes de lo que hoy es Píllaro. Este español de la noche a la mañana se convirtió de un hombre pobre en un individuo rico y acaudalado, ya que el padre de la chica revelo a su yerno, el lugar donde Rumiñahui escondió el tesoro del Reino de Quito, de donde se dice Valverde sacó gran cantidad de oro y plata. Valverde regresó a vivir en su natal España y posteriormente dirigió al Rey un manuscrito revelando la ruta a seguir para lugar donde se encuentra el Tesoro. Este manuscrito desde esa época se lo conoce como la guía o el Derrotero de Valverde, el mismo que consta de cinco jornadas. Desde aquellos días hasta la actualidad cientos de investigadores, científicos, exploradores y buscadores de tesoros han llegado a Píllaro para seguir fielmente el Derrotero, pero no se ha sabido nada.

Personajes, parroquias y riqueza








Píllaro consta de siete parroquias: Baquerizo Moreno, Emilio María Terán o Rumipamba (con el nombre de un destacadísimo personaje de la historia nacional nacido en Latacunga), Marcos Espinel (Chacata), Presidente Urbina (Chagrapamba-Patzucul), San Andrés, San José de Poaló y San Miguelito. La principal actividad económica del cantón es la ganaderí­a con una producción que sobrepasa los cien mil litros diarios, igualmente la fertilidad de las tierras dan lugar a una gran producción de hortalizas, legumbres, cereales y una extraordinaria variedad de frutas. La talabarterí­a, es otra actividad para elaborar monturas tipo galápagos, zamarras, riendas, arretrancas, cinchas, estribos, pellones, guruperas, entre otros. Bueno, Píllaro es como para volver más de una vez. Todavía no hemos hablado de sus valores artísticos, naturales y humanos, caso Nelson Dueñas, los Hermanos Castro, la tierra de la manzana Emilia (por Emilio María Terán), las Hermanas Esparza, el héroe del Cenepa Efraín Pilco, las mejores papas, aguacates, mandarinas  y manzanas, la ganadería brava de los cerros para fiestas de pueblo y grandes corridas, los “Siete chorros” de agua milagrosa, el valle del río Culapachán con clima delicioso, sitios como San Miguelito y la Basílica de la Niña de Jerusalén, la Hostería María Soledad, en fin, tantas cosas de este pueblo antiguo y moderno, hermoso y lleno de gente trabajadora y sana. Hay que volver.
César Pinos Espinoza
www.proyectoclubesdecomunicacion.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario